Rodale Institute, Prueba de sistemas agrícolas (FST) ha estado comparando sistemas de manejo orgánicos y convencionales desde 1981. Los nódulos en raíces de plantas de soja en el sistema orgánico a base de estiércol se compararon con raíces del sistema convencional.

Las plantas leguminosas, como la soja, tienen nódulos en sus raíces donde las bacterias rizobio convierten el nitrógeno atmosférico (N2 gas) en nitrato-nitrógeno disponible para la planta. La energía necesaria para realizar este proceso proviene de la fotosíntesis, donde la energía de la luz solar se almacena en los enlaces de azúcares simples. Debido a que hay cantidades excesivas de nitrato-nitrógeno en el campo manejado convencionalmente debido a la adición de fertilizantes sintéticos, las plantas no asignan energía a la formación de raíces finas para acceder a más nitrógeno del perfil del suelo y la nodulación se concentra alrededor de la raíz principal, La bacteria rhizobium solo se alimenta de cada planta individual (Figura 1).

Figura 1. Las plantas de soja cultivadas en el sistema convencional tienen pocas raíces finas y los nódulos se concentran en la raíz principal. Foto tomada el 9/3/2015.

En el sistema de abono orgánico, se desarrollan raíces más finas y se encuentran nódulos a lo largo de las raíces finas (Figura 2). Una mayor cantidad de raíces finas ayudan a la planta a obtener una variedad de nutrientes del perfil del suelo y los nódulos en estas raíces finas ayudarán a distribuir el nitrógeno por todo el perfil del suelo para cultivos posteriores.

Figura 2. Las plantas de soja cultivadas en el sistema orgánico tienen raíces y nódulos mucho más finos. Los nódulos se distribuyen en la raíz principal, así como en las raíces laterales y los pelos radiculares. Foto tomada el 9/3/2015.